Transcurrieron ya diez años del día en que vio la luz la biblioteca de la sede Parque.

La biblioteca fue un sueño de algunas de las voluntarias de la sede, acompañadas por ejecutivos del lugar, que paulatinamente fue tomando forma y adquirió el volumen que hoy tiene y que seguramente seguirá potenciándose. Fue ese trabajo persistente y sin estridencias el que permitió que el sueño se convirtiera en una realidad tangible. La lectura contribuye de manera exponencial a acariciar el espíritu y extrae de cada uno de nosotros la sensibilidad que no pocas veces se oculta por el pudor social. Se trata de una manifestación extraordinaria de la cultura, a la que la YMCA quiere seguir poniéndole foco. El acto recordando estos primeros diez años tuvo lugar, con una nutrida asistencia, el 31 de agosto.