En el marco de la situación de contingencia que estamos atravesando como sociedad, es natural y esperable que afloren en cualquiera de nosotros, y aún más en los Adultos Mayores, sentimientos de miedo, angustia, depresión u otras enfermedades.

Resulta ineludible cuidar de ellos, identificando estas manifestaciones, en un esfuerzo por revertirlas o minimizarlas, evitando la aparición de posteriores complejidades en materia de salud, sean estas físicas, mentales o emocionales.

Por lo tanto, las personas que estemos en contacto personal o a través de una vía de comunicación a distancia con el Adulto Mayor, seremos los responsables de corroborar que cumplan con las siguientes consideraciones:

• Establecer una rutina que incluya horarios de despertarse, de acostarse y, sobre todo, de alimentación (ya que el consumo de medicamentos suele tener una directa relación con los horarios de ingesta). Es importante no suspender la medicación habitual ni automedicarse.
• Conservar las prácticas de higiene y aseo personal y, además, vestirse como si fuera a salir a la calle de manera corriente. También ocuparse de la casa, generando un entorno agradable para habitar.
• Adoptar, tanto como sea posible, una alimentación saludable que colabore entre otras cosas, a mantener en equilibrio el sistema inmunológico.
• Evitar el consumo excesivo de noticias de televisión, radio u otros medios de comunicación. Siempre verificar las fuentes, dando credibilidad sólo a aquellas que provengan de organismos oficiales y confiables.
• Tener una comunicación fluida, propensa a generar un espacio de escucha atenta que permita al Adulto Mayor, canalizar sus inquietudes y emociones.
• Controlar el cumplimiento de las pautas de prevención enunciadas por el Ministerio de Salud de la Nación.
• Estimular la práctica adecuada de actividad física, siempre dictada por profesionales en programas especializados de salud. También actividades cognitivas como juegos, crucigramas y lecturas, u otras actividades diversas ya sea, pintar, cocinar, arreglar plantas, etc.-
• Estimular el uso de redes sociales, que pueden ser una herramienta de enorme significancia en este contexto, para favorecer el contacto con familiares y personas de su interés.

Para finalizar, es sustancial recordarles que esta situación es transitoria, manteniendo presente la condición de intentar vivirla con la mayor tranquilidad posible.